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26 diciembre, 2011

Quiénes son los químico-farmacéuticos

A los químico-farmacéuticos (QF) poco se les conoce. A veces la gente dice que estudian como médicos, aunque cuando se enojan con ellos en las farmacias les dicen que no les alcanzó para estudiar medicina, entre otras palabras que es mejor no reproducir. Ergo, su identidad siempre está relacionada con la de otro profesional. Podríamos decir que su identidad es no tener identidad o que es una profesión nihilista, si nos situamos en un área más filosófica.

Lo que casi nadie sabe es qué ocurre dentro de la oficina del “químico”. Algunos piensan que no hacen algo y solamente juegan o chatean en el computador, desconociendo que el 95% —número aproximado— de las farmacias no tiene acceso a internet. Otros los confunden con los vendedores (auxiliares de farmacia) y entonces se piensa que hacen todo y son muy sacrificados.
La realidad es otra: no lo hacen todo, pero tampoco hacen nada.
Lo primero que destaca es que es una profesión extremadamente regulada debido a que está asociada a la venta de drogas de uso médico, pero que pueden terminar en drogas de abuso si son mal empleadas. Por lo tanto, el QF debe saber el código sanitario (es inspeccionado por el SEREMI de salud); debe saber el código del trabajo (llegan inspectores del trabajo a las farmacias); saber los nombres, estructuras químicas, contraindicaciones e interacciones de fármacos (mejor conocidos como “remedios” o “pastillas”) y, a su vez, debe instruir (por ley) a su equipo de trabajo de todo esto. Sin hablar de la decodificación que deben hacer para entender las recetas que algunos médicos no se dan la molestia de escribirlas de forma clara y los pacientes no se dan el trabajo de exigir que vengan bien escritas.
Casi todos los QF tienen un contrato sin limitación de jornada de trabajo. Por lo que deben estar disponibles dependiendo de las necesidades del empleador. A su vez, pueden ser cambiados de local en cualquier momento, es decir, hoy pueden estar trabajando en Las Condes y en la semana siguiente en Puente Alto, todo eso si el empleador lo estima conveniente.
Los QF trabajan por turnos, lo que significa que si su colega —que hace el turno de la tarde— se llegara a enfermar o tiene cualquier tipo de inconveniente, un mismo QF debe hacer ambos turnos. No significa que no le paguen horas extra, pero el cansancio es algo que se acumula y comienza a ser no tolerable, ya que son humanos, nada más y nada menos. He sabido de casos en que se mantienen trabajando por un mes entero, desde la apertura del local, por ejemplo, 9am, hasta el cierre, por ejemplo, 10pm. Esto, a pesar de ser legal y políticamente correcto, encuentro que va en desmedro de la vida familiar y afectiva de la persona.
Recientemente se les notificó a las farmacias que deben cumplir con turnos de 24 horas algunos días del 2012. Usted, tal vez ahora comprenda porque esto incomodó al gremio y que se haya sentido pasado a llevar al no haber sido consultado antes. Es cierto: es sumamente necesario que hayan farmacias abiertas las 24 horas para emergencias. Pero cuidado: no perjudiquemos la vida de los trabajadores, no olvidemos que detrás del mesón de la farmacia hay personas (químico-farmacéuticos y vendedores) que necesitan descansar, personas que estarán muy desprotegidas a altas horas de la noche en barrios no siempre muy seguros, ya que existen bandas de delincuentes prácticamente especializadas en robar farmacias. 

1 comentario:

  1. y donde estan...?
    ...los del colegio de QF?
    estan con su gente q esta en primera linea de accion? o estan pendientes de los dividendos de sus acciones en asaltobran, farmacia funada y cruzmiente?
    falta q los qf se hagan respetar, si su colegio profesional no los apoya,habra q buscar la manera, ya q el fin ultimo es la salud publica...

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