Cuando muera (testamento inverso)

La muerte se acerca en silencio y es impredecible, por eso he querido dejar un escrito antes de morir, en caso de que muera mañana. Supongo que si no muero mañana, tendré que ir actualizando algunas de las cosas de este texto.

Me gustaría hacer un testamento inverso: cosas que me gustaría hicieran por mí en mi funeral. 

Me gustaría que en mi funeral sonara una canción pop.

Bueno, a mi hija le debo mis libros, incluyendo los poemas que le dediqué. No sé cuántos llevaré en esa fecha, pero van 2 hasta el momento. Uno es escrito y el otro es el poema de mi vida, en cierta forma, mi vida es una dedicatoria a ella. Me gustaría que leyera todo lo que publiqué. Sé que entendería muchas cosas al leerme. Sé que conocería mucho de mí y tengo la leve sospecha de que sentiría identificada, porque pareciera que mi DNA caló fuerte en ella. Sé que no es muy científico lo que acabo de decir (lo  del DNA), pero no importa, las cosas se le perdonan a un muerto más fácil. 

Me gustaría que me recordaran como escritor. Como alguien que efectivamente se atrevió a escribir. Muchos dicen que son escritores y muchos estudian literatura, pero pocos son los que tienen el valor, las ganas y el atrevimiento de mostrar sus escritos al mundo. 

Digo escritor, aunque me considero a la vez artista, filósofo, poeta y cuentista; lo cual no está mal, está todo relacionado. Me gustaría que cuando muera se dieran el trabajo (en caso de que no lo hayan hecho) de leer mis obras completas. Creo que dejé un importante legado a la humanidad, y bueno, por eso no me gustaría morir aún, porque siento que falta mucho por decir, mucho por recorrer, mucho por sentir, mucho por pensar y estudiar. 

No sé, tal vez esté bajo la influencia de dos películas que acabo de ver -"Before Sunrise" y "Before Sunset"- que quedé con un sentimiento nostálgico, meditativo, romántico y melancólico. Tal vez sea el hecho de haber visto la luna llena en un cielo hermoso y una noche hermosa, sin mayores problemas. 

La quietud de la noche también puede ser la culpable de estas palabras o escuchar la guitarra de Muriel Anderson. 

Probablemente mañana ya esté arrepentido de haber escrito esto. Pero justamente por eso necesito escribirlo ahora. 

Cuando muera, quiero que sepan la importancia de la vida. Con eso me refiero a vivir realmente: seguir tu pasión, seguir... continuar... perseverar. Vivir hasta desvivirte por alcanzar tus metas. Digo desvivir porque cuando abandonas algo es cuando lo obtienes realmente. No es cuando luchas por tenerlo a tu lado. Es cuando le das la libertad de ser: cuando te desapegas de aquello. Esa ansiedad de mantener todo en su justo lugar es lo que te termina matando. Esa deseo perverso de querer que las cosas sean como las tienes planeadas es lo que te hace ser infeliz. A veces necesitamos dejarnos llevar, como si estuviéramos flotando en un río. 

Escribo esto y me dan ganas de escribirles una carta a las personas que quiero. Decirles lo que tengo reservado, lo que siempre les quise decir, lo que nunca les llegaré a decir. Pero entonces, este post quedaría sumamente largo y sería inapropiado. Después de todo, es solo un post, ¿cierto?