Cada vez que leo algo sobre emprendimiento no puedo evitar sentir un marcado sesgo. Solo hablan de casos de gente que no terminó la universidad para formar empresas exitosas de la informática, start-ups, negocios, etc. Leer otro artículo más de estos en la revista El Sábado [1] fue el detonante para que escribiera este post.
¿Por qué siempre olvidan el arte? Olvidan que la mayoría de los artistas exitosos (a nivel mundial) también son emprendedores y olvidan que muchos de ellos tampoco tienen cartón. Emprendimiento según la RAE es acometer y comenzar una obra, un negocio, un empeño, especialmente si encierran dificultad o peligro ¿Y qué otra área hay más peligrosa que el arte? Nadie da nada por el arte. Los artistas, a diferencia de las empresas, no están en la bolsa de valores.
Vivimos en una sociedad que no acepta la diferencia. Me atrevería a decir que después de décadas se está aceptando el hecho de que alguien se retire de la universidad para fundar empresas. Tuvo que morir Steve Jobs para que se dieran cuenta que la universidad no es el único lugar donde están los genios. Los genios casi siempre andan allá afuera, pero nuestra sociedad intolerante no los quiere ver. No puede. Porque se salen del modelo. Porque contradicen la norma. Si no se ajusta al sistema es porque algo mal hay en la persona, pero no te atrevas a cuestionar el sistema.
Bueno, ahora no sé cuánto tiempo habrá que esperar para que la sociedad acepte el salirse de la universidad o, es más, ni siquiera ir al colegio, para escribir un libro, dedicarse a la pintura, formar un grupo musical o de baile, etc. Como ejemplo puedo citar a Christopher Paolini que escribió la novela Eragon a los 15 años. Christopher no necesitó ir a la universidad para escribir su libro, es más, ni siquiera tuvo que asistir al colegio, fue un exitoso caso de home schooled. También puedo citar a nuestra querida escritora Gabriela Mistral que solo recibió educación formal hasta los 12 años. Hoy en día, pensaríamos que con ese nivel educativo solo serviría para hacer trabajos comunitarios o menos que eso, ya que no tendría "cuarto medio", como dice la gente. Pero no, su autodeterminación la llevó a los lugares más prestigiosos y a ganar merecidamente el nobel de literatura en 1945.
1. El éxito de los "sin cartón". Isabel Plant. Revista El Sábado, 19 de Noviembre de 2011. Disponible en el link.
Estoy muy de acuerdo en que el arte está subvalorado, y muy de acuerdo en que alguien inteligente no necesita la Universidad para ser exitoso, y quizás ni siquiera el colegio. Los que levantaron nuestra moderna sociedad industrial se destacaban por su industriosidad, pero muchas veces no sabían ni firmar.
ResponderEliminarCreo que un motivo de nuestra desvalorización del arte es nuestro modo snob e izquierdista de enfocarlo. Cuando a los jóvenes se les dice "arte", se imaginan de inmediato aburridos museos, música clásica y cuadros cubiertos de polvo, además de novelas de siglo XIX. Pero también hay arte en la televisión masiva, el arte puede venderse y todos pueden participar de él. La cultura de masas y lo comercial no debe ser valorado por un concepto clasicista de arte. Es por eso que hoy en día el arte se considera patrimonio de una elite culta, mientras que por miles de años ha sido creado por la gente más normal del mundo y por las masas populares.
Omar: Sí, totalmente de acuerdo contigo. Creo que por una tontería snob mucha gente está perdiendo la sensibilidad artística debido a que no lo desarrolla.
ResponderEliminarAntes era algo de todos y no de una élite.
Debiéramos regresar a esos principios.